martes, 30 de diciembre de 2008

LOS ANGELITOS DE LA VIRGEN DE LAS ANGUSTIAS

Dicen que a la ciudad de Jaén llegó un tal Antón, que trabajó como escultor en las obras de la Catedral. Era un hombre que había venido acompañado de su mujer y dos hijos, pero lo extraño es que nadie conocía a los mismos porque siempre estaban encerrados en su casa y Antón se comportaba de forma extraña evitando relacionarse con nadie. No habrían pasado cuatro años de su llegada a Jaén cuando desapareció con la familia sin dejar rastro alguno. Lo cierto es que transcurrieron cerca de diez años hasta que un buen día Antón volviera a la ciudad.

Llegó Antón hasta el Convento de los Carmelitas Descalzos donde se conservaban varias obras suyas y pidió al superior del convento que fuera acogido como hermano lego. Una vez en el convento Antón contó lo ocurrido tanto en su vida, como su anterior desaparición y destino último. Resultó que fue hecho prisionero en tierras africanas, allí trabajó en casa de un rico musulmán en la que tuvo ocasión de conocer a la hija del mismo; de la que quedó enamorado perdidamente. Llegada la ocasión, lograron huir juntos y trasladarse a la Península. A pesar de esconderse para que nadie descubriera su paradero una noche se presentaron en la casa seis hombres de a caballo armados, los cuales sin mediar palabra le arrebataron la esposa y sus dos hijos.

Muy acongojado quedó el padre superior al conocer tan penosa historia. Pasaban los días y el bueno de Antón trabajaba en el convento tallando un retablo para la Virgen de las Angustias. Realizó unos angelitos llorosos que reflejaban en la cara un espantoso dolor. Aquellos preciosos rostros plenos de amargura, eran el vivo retrato de sus chiquillos en la noche que se los arrebataron, siendo colocados a los pies de la Virgen. Una vez terminado el retablo, no habrían pasado dos días de la bendición, cuando Antón desapareció de una vez y para siempre; sólo dejó una nota, en la que explicaba su decisión de marcharse de allí y de Jaén, pues no podía soportar por más tiempo la contemplación de aquellas dos figuras que le recordaban a sus hijos.



fotografías del archivo fotográfico Seturja

sábado, 27 de diciembre de 2008

LA MONA DE LA CATEDRAL


La mayoría de las catedrales góticas de España poseen grandes imágenes simbólicas en sus fachadas. En el caso de Jaén tenemos la famosa "Mona de la Catedral" situada en un contrafuerte del muro gótico de la catedral. Este personajillo sentado a la forma oriental y ataviado con turbante, con nariz chata y barbado, nos induce a pensar puede ser un animal vestido o simplemente una persona. La leyenda cuenta que desde siempre ha estado la mona vinculada a temas esotéricos y ocultos, ejemplo de ello es el caso del joven que lanzó una piedra sobre la cara de la mona dejándola chata y éste apareció al día siguiente muerto en su casa...Este hecho incrementó más aún la idea de que la mona era un personaje que atraía desgracias. Sin embargo hace unos años, se fotografió tanto a este personaje como el friso que adorna este muro y se descubrió que la mona no es un animal ni un personaje oriental, lleva sobre su cabeza la barretina que es un gorro típico de la zona de Aragón y Cataluña, lo que nos puede indicar que este personaje pueda posiblemente ser el autorretrato de alguno de los maestros canteros que trabajaron en la factura de la segunda catedral gótica de Jaén.

jueves, 18 de diciembre de 2008

JAÉN...PASEANDO LA CIUDAD (VIDEO)


fotografías: archivo Seturja

BAÑOS ÁRABES (HAMMAN AL WALAD)


Durante la dominación musulmana existieron en Jaén numerosos Hamman (baños árabes). Eran locales públicos que servían como punto de encuentro, en los que se debatía temas de diversa índole: políticos, sociales o culturales que afectaban a la ciudad. Los baños constaban de varias estancias: patio de entrada, sala fría, sala templada y sala caliente. Eran baños de vapor, en ningún caso de inmersión. El calor era producido por unas calderas que calentaban agua, haciéndola circular a través de diversos conductos situados bajo el suelo y por las paredes.

En Jaén destacan los baños construidos en el siglo XI conocidos con el nombre de “Hamman al-walad”. Están situados en la actual plaza de Santa Luisa de Marillac, en el sótano del Palacio de Villardompardo. Prestaron sus servicios durante varios siglos, hasta que la ciudad fue conquistada por el rey Fernando III el Santo, en 1246. Se surtían del agua del gran raudal de la Magdalena. A finales del siglo XVI, D. Fernando de Torres y Portugal, conde de Villardompardo, hizo construir un palacio sobre estos baños, que quedaron medio enterrados con la cimentación de este edificio. En la segunda década del siglo XX fueron descubiertos, iniciándose una ardua labor de restauración, llevada a cabo por el arquitecto Luís Berges Roldán. En 1984 se le concede el galardón “Europa Nostra de Restauración”.



Video tomado del Área de Cultura de la Diputación Provincial de Jaén

martes, 16 de diciembre de 2008

EL PATIO DE ABLUCIONES DE LA IGLESIA DE LA MAGDALENA

Uno de los vestigios del pasado hispanomusulmán de Jaén mejor guardado lo podemos encontrar en la Iglesia de la Magdalena. Se trata de un patio de abluciones (sahn) de la antigua mezquita principal que se erigía en este lugar. Casi todas las mezquitas, casas y otros edificios del mundo islámico contienen un sahn, el cual se encuentra rodeado en todos sus lados por una arcada llamada saquifa que era el lugar destinado para las mujeres. En estos patios se dispone en la parte central de una alberca o fuente (sadirvan) para los baños rituales en los que el creyente procede a lavarse ciertas partes de su cuerpo recitando diferentes oraciones del Corán.

Visitar este patio nos induce a conocer las señas de identidad de la cultura musulmana, a disfrutar del olor del azahar de los naranjos, de las espléndidas vistas del castillo de Santa Catalina y del sosiego que ofrece este lugar...


fotografia: archivo Seturja

miércoles, 10 de diciembre de 2008

ASÍ REVIENTES COMO EL LAGARTO DE JAÉN...

Cuenta la leyenda popular que había un enorme lagarto que moraba por el arrabal de la Magdalena, teniendo atemorizados a los vecinos de la ciudad. Hidalgos y caballeros se enfrentaron a la bestia, pereciendo todos en el intento; hasta que un reo de muerte pidió cambiar su pena si lograba acabar con la fiera. Así, fue dejando panecillos desde el raudal hasta las afueras de Jaén, donde se encontraba la trampa, que consistía en un cordero relleno de pólvora. El largato fue devorando los panecillos hasta que dió con el manjar del cordero. El reo aprovechó la ocasión para encender una mecha y provocar la muerte de la fiera.

De esta forma quedó entre el refranero jiennense la frase "así revientes como el lagarto de Jaén" para maldecir al contrario...

foto tomada: archivo fotográfico Seturja

martes, 2 de diciembre de 2008

VISITA LAS CIUDADES DEL RENACIMIENTO EN EL PUENTE


El puente de la Constitución y la Inmaculada es la oportunidad ideal para visitar aquellas ciudades culturales que todavía no conocemos, sobre todo aquellas que nos transportan a otra época. Éste es el caso de Úbeda y Baeza, que con su rico y vasto patrimonio arquitectónico nos hacen retroceder en la historia, impregnándonos de ese aire señorial y religioso. Paseando por los rinconces de Baeza encontraremos la Catedral de Santa María de Vandelvira, el Palacio de Jabalquinto, la Plaza del Pópulo, la Universidad Antonio Machado... una ciudad recoleta y apacible. Si queremos bullir en el tránsito de gente y algarabía, Úbeda nos ofrece aire moderno mezclado con murallas y torreones, palacios y plazas monumentales como la histórica Vázquez de Molina donde se encuentra la Sacra Capilla del Salvador.

Tenemos a nuestro alcance un puente en el que disfrutar de dos ciudades únicas reconocidas mundialmente como Patrimonio de la Humanidad.


RESERVAS


Úbeda: ARTIFICIS, C/Baja del Salvador, 2 (953758150)

Baeza: PÓPULO, Plaza de los leones, 1 (953744370)

NOTA: El día 6 a las 20:30 en la ciudad de Baeza se hará una visita teatralizada por la ciudad.

fotos tomadas de:
temario-historia.nireblog.com
flickr.com/photos/ipso/302333390/